Tin Tan, el pachuco de oro, es sin duda uno de los principales comediantes de la historia de México, legando una extensa filmografía repleta de joyas del humorismo que siguen provocando carcajadas en el enorme público que sigue disfrutando de sus cintas. El estilo de Tin Tan, repleto de juegos de lenguaje y el uso del spanglish, le valieron críticas de los principales personajes de la alta cultura de su tiempo, así como el favor y respeto de la mayoría de la gente.
A pesar de que el estilo de húmor de Tin Tan ha sido objeto de un sinnúmero de análisis, se suele pasar por alto al caricaturista que, con sus dibujos, ayudó a popularizar la imagen del personaje, no sólo dentro de México sino en el extranjero. Nos referimos a Ernesto García “El Chango” Cabral, de quien se dice incluso los Beatles eran fans de su trabajo.
“El Chango” Cabral, veracruzano de origen, es uno de los caricaturistas más importantes de la historia de México, alcanzando fama desde muy joven por las duras caricaturas que realizó en contra de Francisco I. Madero, quien lo becó en Francia para evitar que siguiera realizando sus críticas caricaturas. En París coincidió con Diego Rivera, Amado Nervo y el Doctor Atl, con quienes cultivó una larga amistad, además de trabajar en importantes revistas francesas (Vie Parisienne, La Rire y La Bayonette) para sobrevivir después de que, debido a la Revolución Mexicana, dejó de recibir su beca.
Después de perfeccionar su estilo Art Deco, Cabral recorrió parte de Sudamérica, donde siguió consiguiendo trabajo en una enorme cantidad de revistas. Finalmente, regresó a México donde trabajó durante años realizando carteles publicitarios para películas, murales, ilustraciones para revistas y periódicos, pero sin duda su mayor fama se debe a sus caricaturas.
A pesar de realizar multitud de carteles para montones de cintas, las más expresivas son las que realizó para promocionar las películas de Tin Tan, donde el dibujante conseguía mezclar perfectamente su estilo Art Deco y Art nouveau con gestos exagerados de los caricaturizados, que prácticamente les brindaban movimiento a pesar de lo rígido de las posturas que solían adoptar sus personajes, sin mencionar la colorida iluminación, con tonos brillantes, rojos y amarillos poderosos, que eran parte de su sello.
Lo estilizado de las caricaturas de Cabral no impedía reconocer a los retratados, a pesar de que, como en el caso de Tin Tan, exagerara el tamaño de su boca y dientes, así como el de los ojos de todos los personajes. Por si fuera poco, las hermosas actrices que compartieron cartel con Tin Tan también solían salir en las obras de Cabral, un declarado admirador del cuerpo femenino, por ello las piernas largas y torneadas, así como los cuerpos de mujeres potentes eran casi siempre imprescindibles en los pícaros retratos.
Los dibujos de Cabral están llenos de su talento, a pesar de que ahora su fama a decaído mucho, en su tiempo fue admirada incluso fuera de nuestro país, lo cual le brindó la oportunidad de conocer y trabar amistad con personalidades de la talla de Charles Lindberg, Lenin, Caruso, Walt Disney, John D. Rockefeller y Ana Pavlova.
Lo más interesante de la obra de “El Chango” Cabral es que podía ser admirada tanto en elitistas galerías de arte, como en revistas que costaban unos cuantos centavos, por lo que todos los mexicanos de los años cuarenta conocían su trabajo, incluso sin saber quien era el autor de las caricaturas de Tin Tan y de otros actores.
Aquí dejamos una pequeña selección de la obra de Cabral vinculada con las películas de Tin Tan: